No puedes existir, no sé inventarte,
me empeño en esperar de ti maneras,
leal, hermosa, loca, razonable...
la realidad es parte de la vida.
Acaso existas solo en mi cabeza.
Puede que estés a solo cinco calles
y sea suficiente con tus ojos,
y el aire de tu nuca me enloquezca.
Me adentro en tu comarca agreste y dulce,
magnético de amor y de aventura,
y todo lo que sé, me toma el pelo.
Cinco sentidos fundidos en uno,
tiembla el futuro, cae, se diluye,
ahora existes, no preguntes cómo.
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